Con los oídos zumbando
por la mala transmisión,
Pinar dio sin compasión
cabillas a contrabando.
Paradelo iba lanzando
-casi el tercio terminó-.
Más Danilo relevó
y en vez de lanzar seguro,
quince palos contra el muro
fue el trabajo que logró.
Qué malita la defensa,
y en este estadio, peor,
igual que Arencibia, el sior,
dando duro, ¡qué se piensa!
Con la presión de la prensa
Cedeño estuvo por fin.
Sin resultados y sin
aprovechar el momento
va a regresar pal asiento
o a buscar su maletín.