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Los vecinos de mi suegra

Hoy Migdalia me pidió
en Facebook autorización
pa que diera mi opinión
de algo que ella escribió.
Confundido quedé yo
pensando que era una queja.
Y saqué una moraleja:
«ella es de buen corazón»,
era una Felicitación
para Inés, de esa vieja.

Y temprano, calladita,
llegaba de Siboney
con el encargo de un key
la buena vecina Hildita.
«Que quiere ser su amiguita,
que hubo un malentendido».
Y le contaba al marido
que vendrá orita a las tres
a darle un abrazo a Inés
y olvidar lo sucedido.

Y también me dijo Maray
refiriéndose a mi suegra
que hoy en día ella se alegra
de que rencor ya no hay.
Que encargó en el Escambray
unas botellas de ron.
Y que tiene una emoción
que no se puede aguantar,
de poder participar
en esta celebración.

Lo cierto es que los vecinos
chismosos y chanchulleros
hoy no fueron tan breteros
jodedores, ni mezquinos.
Alegraron sus caminos
mostrando bien sus bondades.
Pues cambiaron las maldades
las malicias y los daños
porque Inés hoy cumple años
y merece: FELICIDADES.

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Publicado enFamilia

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