La energía es diferente
cuando Despaigne aparece,
la tanda se fortalece
y se respira otro ambiente.
No hay que ser clarividente,
el Caballo es la bujía.
Ya la gente lo pedía
y fíjense cómo entró,
que al motel hoy la mandó
(fue la noticia del día).
La «salá» hoy le cayó
a la flotilla pirata,
a sabiendas, candidata,
porque Granma lo anunció.
Dos nocauts, ¡acabó!,
un abuso beisbolero.
Raico dio, en el primero,
un Grand Slam poderoso,
que puso a Pachi nervioso,
ni encontraba el lapicero.
Le dieron chance a Alarcón
sustituyendo al «bellaco»
y qué bien por el chamaco,
causó tremenda impresión.
Y hasta Damián, sin presión,
jugando el jardín central.
Yosvany no lo hace mal,
que se quede ahí mejor,
ese es nuestro receptor
coge y batea, integral.
A Alexquemer ni lo miento,
ese caballo es «el mío»,
cuando saca el poderío
es que brilla su talento.
Y al «diamante» no lo siento
ni con el juego ganado.
Hay que tenerlo ocupado,
eso dijo su jevita,
que llegó desde Pompita,
y lo tiene controlado.
Impecable fue Ferrales
y bien por Sammy otra vez,
dos jonrones de Avilés
fueron hoy fundamentales.
Y mañana, carnavales,
no habrá trabajo, ni escuela.
Me dijo orita mi abuela
que ya había gente marcando
y sombrita asegurando
pa mañana en Campechuela.
